Pilar Soriano Molla

La doctora prácticamente me ignoró, las preguntas apenas las respondía y le comentaba a la otra doctora o enfermera lo mal que le parecía que yo quisiera usar la copa menstrual, que no sabe por qué se pusieron de moda, que el marketing había sido muy bueno porque “es una guarrería”, mejor usar tampon y a la basura. Le expliqué que la copa se esteriliza y que era más ecológico y le dijo a la enfermera “entonces no use coches si quiere ser ecológica”. Luego le dije que la copa se pagaba una vez y no todos los meses como los tampones y me dijo “tienes tatuajes, eso si es caro” (recién ahí me habló directamente). Después del examen me empezó a hablar como si fuera una niña que no entiende nada, muy condescendiente. La peor visita ginecológica. No la recomiendo para nada. Mejor esperar disponibilidad de otro médico.